dilluns, 30 de maig del 2011

BARCELONA, MAYO 2011

Todas/os nosotras/os nacimos en el infierno.
Nos tocó un momento histórico en el cual, como contextos sociales y también de la interioridad, toda una civilización transitaba los últimos momentos de su proceso espasmódicamente. Momentos de decadencia profunda.
Crecimos respirando el desaliento interior de nuestros entornos adormilados y aprendimos, cada cual como pudo, a movernos entre los oscurecimientos del alma humana.
Esta civilización, no obstante, era la primera en la que se habían conectado todos los rincones del planeta. Y esto, que podría imaginarse como gran hecho feliz, resultó haberse producido como falsa conexión. Todavía no era la conexión de los individuos que, al igual que las neuronas en un cerebro, efectuaran su sinapsis.
Eran los intereses de criminales y manipuladores anti-humanistas los que habían expandido su radio de acción hasta esa escala. Y ahora, el planeta entero era un infierno desalmado y corrupto. Llegó a ser frecuente y cotidiano escuchar el terrible mensaje de que, supuestamente, los humanos éramos la escoria de la naturaleza viva, unos seres detestables, un experimento fallido de los dioses, y hasta el resultado de planes destructivos de extraterrestres...

Pero desde este bendito 2011, las niñas y los niños que nazcan respirarán en su paisaje humano de formación el brillo emocionante de la esperanza, el pálpito de la acción creativa, la inspiración del deseo lúdico y fraternal, el despertar de lo Profundo, el alba de un ambiente celestial...

Se trata de un salto de la especie que habrá costado gestar como el más difícil de los partos. Un salto en el cual se comenzará a dejar atrás la violencia.
En el mundo natural y animal, la violencia es pro-vida. En el mundo HUMANO, ya no. Hemos llegado al final de ese camino. Un camino que nos venía dando señales, pero que necesitaba su tiempo de proceso de transformación y, en la nueva contradicción que nos iba generando, necesitaba tocar fondo.
Al tocar fondo se produce la sinapsis entre millones de individuos, a la vez que otros pocos, incapaces de relacionarse con lo diverso y lo igualitario, buscan “cabecillas” de lo nuevo para poder simular el diálogo e intentar luego la aniquilación, evidenciando su incapacidad de comprensión de lo que está sucediendo. La reafirmación en sus “éxitos” les ha hecho quedarse...

Así que las viejas alegorías sobre cielos e infiernos podemos palparlas hoy casi con la mano, en lo biográfico, en lo social y en lo que va más allá de nuestra desaparición física.
Nos tocó conocer muy bien el NO. Ahora nos levantamos como constructores del germen del SI, con todo el conocimiento de causa.

2 comentaris:

Esther Bass ha dit...

Te has universalizado Xavi! qué bueno!

Xavier Batllés ha dit...

Pues menuda interpretación tenías de mi..., Esther! Qué pena!